Jugadora, capitana, entrenadora, referente y alma del Rugby Alcorcón
Han pasado ya algunos días y nos sigue costando mucho. No nos acostumbramos ¿sabes? Tus tigres no se acostumbran a no verte como el torbellino que siempre fuiste, no se acostumbran a que no te apuntes la primera a todo, a no verte perfectamente bella y elegante, no se acostumbran a no sonreír ante tus cabezonerías o tus ocurrencias en el tercer tiempo, no se acostumbran a no tenerte encabezando la escuela o liderando el femenino. Cuando Mamen me dijo que tenía que “juntar estas letras” para ti me pareció una enorme responsabilidad por todo lo que has hecho en el Club. No era quien más te conocía, pero la entrevista que te hice durante el confinamiento fue inolvidable… Por todo. En la distancia me trasladaste energía pura. Sin embargo, conforme han pasado los días la responsabilidad se me ha hecho más grande. ¿Sabes por qué? Porque no te imaginas lo importante que eras en la vida de muchas personas Marina. No te imaginas lo que te ha querido la gente. Bueno… Lo que te quiere. Porque es imposible hablar en pasado cuando las personas que estamos aquí abajo te tienen tan presente. Marina has dejado un hueco enorme en muchas personas. Para muestra nuestro Presi… Que con toda su fortaleza y pragmatismo cada vez que habla de ti le cambia el timbre de la voz y le brillan los ojos. Tu has sido capitana, entrenadora, amiga... Pero por encima de todo has sido piel de estos tigres y tigresas.
Como dice la canción de Lori Meyers “Hay que disfrutar el presente”. Pues tú, disfrutando el presente, con la fuerza que te daba la pasión que sentías por lo que hacías, te has convertido en una mujer importantísima para mucha gente. Sí, en una persona importante, porque has sido el motor de la escuela. Has sido única inculcando a los niños los valores del rugby, pero, especialmente, consiguiendo que los niños se diviertan practicando nuestro deporte. No sé si has cogido wifi allá arriba y has podido leer que la escuela, tu escuela, llevará tu nombre “Los Tigres de Marina”. No discutas… La escuela no podía llevar otro nombre que el de la persona que no ha parado de hacer disfrutar a nuestros pequeños.
Eres un referente para el Rugby Alcorcón. Siempre has pensado 24 horas en mejorar las cosas. Sé que lo sabes… Pero tus niños y niñas simplemente te adoraban, tenías un don, y todas las familias de la escuela no te imaginas lo que ya te están añorando. Nunca has dicho que no a resolver un problema. Cualquier circunstancia que hubiera te lanzabas a ponerle una solución. Tu orden, tu perfeccionismo, tu energía, tu eterna sonrisa… Todo te hacía única. No parabas. Como dice el Presi “Marina hacía 50.000 cosas”. Recuerdo la de vueltas que le diste a las fotos de la entrevista. Te costó mucho elegirlas porque querías verte bien guapa. Todavía tengo el mensaje de WhatsApp en el que me decías “Gracias por la entrevista. Fantástica pluma. Yo no hablo tan bien”. ¿Sabes qué? Hacías muchísimas cosas bien Marina. La más importante era demostrar lo que la gente te importaba cada día del año. Sin necesidad de decirlo, estando, sin necesidad de decirlo, demostrándolo. Tu implicación y tu forma de ser te hacían única y por eso has dejado una huella imborrable en este Club y en toda la gente que te conocía. Para muchas personas del Club, conocerte ha sido una de las mejores cosas que le ha regalado el rugby. Has sido una líder.
¿Te acuerdas ese partido en Yuncos que nos ganaron por muchos? Cada vez que nos metían tú ibas corriendo al centro para seguir y seguir y seguir sin pensar en perder un segundo. Esa eres tú. Avanzar y perseverar en todo. Sin ti el rugby femenino no hubiera salido adelante. Siempre vas a ser la eterna capitana. Conociéndote seguro que no le das importancia, pero tu labor con lo peques, el germen que has dejado en todos y tu impulso al deporte femenino has sido fundamental para nuestro Club.
No sé si lo sabes, pero tu nombre va a ir en la camiseta y vamos a rugir para que el primer campo de rugby de la localidad lleve tu nombre. Eras una tormenta de amor, de cariño, de buena energía, de ilusión, de rugby… en todo. Y todo esto te lo mereces. Aunque la verdad, maldita la hora en que te has ido porque no te imaginas lo que se te echa de menos, la falta que nos haces. Tenemos tantos abrazos huérfanos, tantas palabras que decirte, tantas lágrimas que se nos han escurrido.
Algunos harían lo que fuera por decirte en persona “Marina no sabes lo buena amiga que fuiste y lo importante que fuiste en mi vida”. Nos has dejado con el corazón roto. Eras una crack y cuando un crack sale del campo, la melé cuesta un poquito más. Y a tu Club no te imaginas lo que le cuesta empujarla sin ti. Contigo no había medias tintas. Eras capaz de mover una manifestación y de convencer a cualquiera para bajar a entrenar o ir a jugar. Conectabas con todos y nos hacías conectar entre nosotros.
Ahora somos tigres y tigresas heridos. Estamos mal porque nos faltas. Negarlo es absurdo. Pero desde ahora tenemos otra motivación más “ser guardianes de tu memoria y tu legado”. Sabemos que el mejor homenaje es seguir rugiendo y continuar tu camino. Marina queremos mandarte allá arriba un millón de GRACIAS por TODO lo que nos has dado en vida. Tu amor, tu cariño, tu risa, tus infinitos WhatsApp, tu impuntualidad, tu fuerza, tu compromiso, tu coquetería, tu preocupación por todos… Que sepas que te queremos. Que de aquí no te vas porque nadie, nunca, te va a olvidar. ¿Si supieras cuanta gente nos ha llamado hablando maravillas de ti estos días? Tus 44 años han sido espectaculares porque aquí abajo dejas un ejercito de admiradores que pensarán en ti siempre con admiración y cariño. Por eso, Marina, por cómo eres y por lo que has hecho, ya eres eterna. Por eso no nos vamos a despedir de ti. Porque tu nombre va a estar en nuestro corazón y en cada rugido de cada día.
Seguro que allí arriba estarás ya liada con el oval y organizando algún partido. Les habrás explicado cuales son los elementos básicos del tercer tiempo. Recuerda no chocarte con los taburetes, date algún baile en honor de los que estamos aquí abajo, seguro que la cabalgata allá arriba te va a quedar genial y no te pierdas los partidos del finde que siempre vamos a necesitar tu apoyo. Algún día, donde estemos, volveremos a jugar juntos.
Marina te queremos y siempre vas a estar con nosotros.
